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viernes, 18 de febrero de 2011

Ausente

Ni siquiera ella sabía de qué iba el asunto. Reímos ambos -tanto él como yo- cuando nos percatamos de ello. Fueron varias las miradas cómplices que se cruzaron en la mesa y otras tantas de incertidumbre por parte de ella. "No lo van a entender", dijo él, pues tanto ella como el resto desconocía nuestra historia.

Hablamos de esto mismo, mi época semi-ausente. Yo creía que las paredes del lugar escucharon todo lo que pudieran escuchar en estos dos años pero no, estuve equivocada. "¿Seguro que no sabías nada? ¿Nada de nada?", pregunté y ella -con cara de sorpresa- contestó que no, que no sabía nada del evento y mucho menos de la historia. "Ya te contaré, ya", terminé diciendo.

martes, 23 de junio de 2009

Mírame y no me mires

Tu mirada se me clava como agujas en la cara. Quiero saber por qué tus ojos recorren el azul de los míos, por qué navegan por el mar de mis pupilas, por qué pretenden memorizar el brillo que se refleja en ellos. Me pregunto por qué ahora y no luego, por qué ahora y no antes; tuviste una oportunidad de oro pero dejaste que escapara, que volara por los cielos, que se perdiera por el horizonte aún sabiendo que jamás volvería a ti.

Interrogo tu mirada que se incrusta en mis pestañas. Tus ojos callan aunque ya dijeron todo al presenciar cómo las uñas se me hundían en la carne, al ver cómo mis labios se desvanecian, al contemplar cómo mi silencio enturbia mi mirada.

Amor, soy un huracán y un huracán lleva mi nombre.

jueves, 11 de junio de 2009

Cielo

Hablemos del cielo y el infierno. Hablemos del cielo cuando estemos serenos; hablemos del infierno cuando no queramos ni estar.

Sube las escaleras y quédate tranquilo, los demonios tienen prohibida la entrada, ellos no podrán molestarte si no los buscas. Ahora bien, puedes buscarlos pero después no te quejes de sus horribles miradas ni de sus temibles actos.
Palabras nocivas flotan en el aire, podemos mirarlas embobados o podemos retirarlas con la mano. Coges una y se te escapa entre los dedos, se escurre como si fuera niebla, se desliza como si fuera agua. Yo la toco y se desvanece, se disuelve como la cera frente a las llamas.

Cuando hayamos bajado al infierno, recuérdame que te recuerde todo lo que hemos escuchado.

jueves, 4 de junio de 2009

Ahora que te vas

Ahora que te vas intercambiamos opiniones, me cuentas casi todos tus secretos, te interesas por mi pasado, mi presente y mi futuro. Te marchas y me preguntas cómo me van las cosas, cómo me va la vida, el porqué de una extraña creencia, dónde iría si no fuera nadie.

Supuestamente, te vas. Te vas y no volverás. Fue nuestro diálogo más extenso y maldigo mi suerte porque justo aparece a pocos días de tu partida. Fue mi última conversación contigo y la única que dio sentido a nuestra posible amistad.

Pudimos ser amantes -de hecho, estuvimos a punto de serlo-, pudimos ser los mejores amigos de la Tierra pero, sin embargo, llegamos a ser los peores enemigos durante un prolongado tiempo.
Me lanzaste las peores palabras a la cara y yo guardé las mías en una caja ofreciéndote tan sólo silencio. Silencio que te dolió más que otra cosa y te hizo realizar actos que ni tú mismo creías que podrías hacer. Me quedé muda dos meses y durante dos meses tu mirada era sólo tristeza. Pero después, mucho después, volví a dirigirte la palabra y volví a estar semi-ausente aunque sé que tú ya estabas ausente perdido.

Ahora que te vas es cuando somos los mejores compañeros y, ahora que te vas, no quiero que te vayas.

domingo, 26 de abril de 2009

Fantasmas del pasado

Él desapareció y ella no aparece. ¡Señoras y señores, vamos a darle la vuelta a la tortilla, unámonos todos y organicemos una estratagema para engatusar a la persona más imparcial que puede llegar a existir en el infierno que siempre describo!

Ella no aparece y él desapareció pero -de repente- volvió a mostrarse, volvió a mirarme como ayer, volvió a sonreír y yo volví a quebrarme. Ella se disipó sin decir nada. Él emergió de entre las tinieblas, siendo así un fantasma del pasado.

domingo, 5 de abril de 2009

K

Voy a olvidarte mientras te recuerdo, mientras evoco todas las imágenes, las impresiones, las palabras, las sonrisas, las lágrimas... mientras me acuerdo de todo lo que te relaciona.

Saqué la k del baúl y la dejé encima de la estantería, que es el lugar donde nunca debió haber sido movida. Está justo en frente de los libros que más me emocionaron, aquéllos que me llegaron profundamente al alma del mismo modo con que lo hiciste tú. Tú llegaste a mi corazón -a todo mi ser- casi de la misma manera con que me llegan mis tan apreciados libros.

Es la k la que me hace recordarte, es esa k la que revoluciona mis neuronas. Es la k de kappa, de kilo, de kermes, de kirie, de kéfir, de krausismo. Es la k de ti.

Retiraré la k de la estantería para volver a guardarla -o esconderla, viene a ser lo mismo- en el fondo del baúl. Espero que no vuelva a ver más la luz.

sábado, 4 de abril de 2009

Verte

Darme la vuelta y verte. Verte sonriendo, verte en alegría, verte en llanto, verte en agonía, verte en el enfado, verte agobiándote, verte suplicando, verte en los buenos momentos, verte en los malos momentos.

Mirar hacia delante y verte. Verte flirtear, verte en el cansancio, verte en la cumbre, verte a lo lejos, verte muy cerca, verte aquí, verte allí, verte tocar, verte escuchar, verte tan sólo oyendo, verte sintiendo, verte mirar, verte mirarme, verte en mis ojos, verme en tus ojos.

Te he visto mas no quise. Cerraré los párpados para no poder verte y así evitar la tentación de mirarte.

viernes, 3 de abril de 2009

Este fin tan esperado

Y, posiblemente, llegó este fin tan esperado. Digo posiblemente, pues esa predicción llegó a mí numerosas veces y siempre quedó en una falsa alarma. Aún así, creo que todo vuelve a su cauce, que yo vuelvo ser yo misma como cuando era antes.

Una nueva predicción llegó a mi mente con tal fuerza, de un modo tan peculiar que, simplemente, es posible que haya llegado este fin tan esperado. Sí, es posible...


...y de posibilidades va la historia.
...y de posibilidades va el amor.

martes, 31 de marzo de 2009

Lo que el amor oculta

Voy a matar al gerente a corbatazos, lo voy a echar sin más, pues me cansó su mal carácter, pues no trabaja como es debido. Llevo tantas cosas en la vida, que nadie puede imaginarse cómo me agotan las distintas situaciones -y me esfumo y me volví completamente loca- aunque todo esto no disipa mis múltiples opciones.

¿Y a ti qué te pasa? ¿Qué crees que estás haciendo? No respondas, no lo hagas, deja que lo haga yo por ti: te limitas a repetir la misma historia.

Mientras, el hombre de la tele dice que se abotarda (abotardarse, ¿a caso eso existe?) pero yo creo que se abotarga y tanto tarda el tema en cuestión que no recordaba el color de su corbata. Encorbatado estaba -sí- y yo, que estoy harta, voy a matar al gerente a corbatazos.

lunes, 30 de marzo de 2009

Aversión

Quisiera hacer paracaidismo sin paracaídas y así poder volar con total albedrío o morir en el intento. Pero morir ya es volar, es liberarse completamente del propio infierno, es notar cómo el alma escapa del cuerpo, es ser eso: alma, alma y nada más.

Me plantaría frente a la pared y comenzaría a pegarme cabezazos hasta ver espachurrarse mis sesos, hasta presenciar cómo la sangre enturbia la pintura blanca. Clavaría mis uñas en la mesa con suma fuerza y las partiría y quebraría la propia mesa haciendo chirriar el aullido del silencio.

¡Puaj! ¡Qué desagradable! ¡Qué soez! ¡Cómo me duele recordarte!

sábado, 28 de marzo de 2009

Sangre rosa

Tengo el alma rota en mil pedazos, el corazón muerto, los ojos inyectados en sangre rosa: estoy enferma, mi obsesión por ti me ha perturbado. Obsesión por obsesionarse ante un amor realmente inalcanzable, completamente utópico.

Apareces como si te hubieras ido, como si nunca hubieses existido. Ahora eres tan distinto, tan real, tan como nuncahubierapensadoqueseríasasí. Abrí los ojos. ¿Gracias? Ciertamente, no sé si dártelas.

Mis lágrimas lloran -impotentes- porque se dieron cuenta que jamás estuviste a mi lado, que nunca fuiste como yo pensé. Te idealicé y, por ello, mi alma está de luto.

Los nobles llevan sangre azul y yo, literalmente, llevo en mis venas sangre de color de rosa. Sí, literalmente.

jueves, 26 de marzo de 2009

Amargura

Se me revuelve el alma cada vez que pasas frente a mí. Tu presencia me resulta amarga, tus ojos no me parecen sinceros pero los míos se sinceran ante tu persona. Me resulta incómodo mirarte porque en mi mirada aún hay amor y eso es algo que hace tiempo que debió haber desaparecido.

Se desvanecen mis ganas de vivir mientras otras ilusiones entran por la ventana y este amor mío pretende salir por la chimenea. La puerta está cerrada, tiene la llave echada y cientos de candados que impiden su apertura. Es una puerta blindada, me costó muy cara, me resultó difícil de conseguir. ¿Y para qué tanta seguridad en la puerta si las ventanas están abiertas, la chimenea a la vista? ¿Para qué, si mi casa está en ruinas?

Insomnio

Incluso en el día más triste de mi vida, eres capaz de hacerme sonreír.

...y río y río y río y no puedo parar de reír.


Te aprecio tanto que no imaginas cómo deseo tu felicidad en cada instante, que no sabrías porqué de ti estoy tan pendiente, que no sospechas cuánto te valoro.
Te quiero tanto que desconoces mi gran deseo de abrazarte, que no percibes este afán ni esta mi desesperación, que ignoras cómo siento, cómo te siento.

Si olvidas mi nombre la tristeza invade mi alma. Si río será porque te he visto y hemos sido escuchados.


Timidez suprema, eres un alma olvidadiza.

domingo, 8 de marzo de 2009

Última parada

Todas mis ganas -en un-sólo instante- marchan, se desvanecen ante ti.

Demasiado tiempo esperando y, al final, terminaré diciendo lo que jamás creí que llegaría a decir: basta.

viernes, 6 de marzo de 2009

Diurna

Tengo una pequeña historia metida en el bolsillo y el autobús guardado en la cartera. Llevo tus palabras tatuadas en los labios, tengo los oídos cansados de escuchar hablar de ti: no hay ni un sólo día que no formes parte de una de mis conversaciones porque eres mi tema principal y el tema principal de muchas almas inquietas.

Amanece un día claro mientras mis delirios se esparcen por mis oblicuos pensamientos. Tú eres mi único sentimiento -el más grande, el más puro-, eres tú por el que más pongo insistencia. Cada día que pasa es un tormento y cada noche que marcha ante mis ojos es el martirio más intenso.

Y te aconsejamos.
Y nunca debiste irte tan de repente.
Y nos preocupamos.

Hablar contigo de frascos embotellados, de mitos inventados, de libros jamás escritos, cuando -en su lugar- deberíamos estar hablando del amor jamás encontrado en tus inciertos vocablos. Yo sigo estando aquí aunque parezca no estarlo.

Me conmueven tus extrañas reacciones a mis sensiblerías más absurdas: te amo y no hay más que hablar.

martes, 3 de marzo de 2009

Nocherniega

Caminar sin rumbo -por un reducido espacio- mientras la imagincaión sobrevuela mis fronteras. Pensarte sin descanso hasta perder el juicio por completo. Permanecer escondida entre los arbustos del amor a la vez que muestro mi sentir como si de todo se tratara. Tú sigues ahí, inmóvil, completamente petrificado, quizá sorprendido, asombrado ante mis palabras de anhelo, confuso ante mí.

Miras, observas pero tus labios nada expresan. Son tus ojos los que hablan por ti, son ellos los que me dicen lo que sucede por tu mente. Sin embargo, es tu silencio el que me resquebraja el alma pues logro confundir tus actos si ello me conviene más antes que afrontar la realidad. Es en estos momentos cuando el coraje se apropia de mi ser y nada más me pregunto en porqué y porqué.

La luna se ocultó tras la neblina, tú desapareciste frente a mis ojos. Es tu mirada la que me guía en la noche.

lunes, 2 de marzo de 2009

Sonámbula

Podría decirte que soy la suave brisa que sopla entre los árboles, que todo lo que vi no fue cierto, que nada de lo que viví fue real. Sin embargo, a pesar de las muchas complicaciones que rodean mi persona, te soy sincera, te soy leal.

Te espero casi sin quererlo, te quiero casi sin pensarlo. Sí, te quiero pero no pienso en quererte sino pienso en ti porque te amo. Cada frase que sale de mis labios, de mis dedos, de todo mi ser, está empapada de tu esencia. Es tu sola presencia la que me hace temblar en mi agonía, es tu mirada la que me ruboriza en un destello.

Durante el día es cuando te anhelo, durante la noche es cuando te sueño. Claros infinitos de sueños voluptuosos son los que me acompañan en la oscuridad pero despierto en un lugar desconocido con el temor adueñando mi cuerpo: te recuerdo mas no estás.

Quererte tanto me perturba, pues duermo mucho pero no descanso nunca.

miércoles, 25 de febrero de 2009

Hallé en ti lo que falta en mí

Arrancarte de mí y morir desangrada, deseando -en mi agonía- que este suplicio pronto acabe. Sacarte de mi cabeza con un sacacorchos mientras le pido al viento que me eleve en un suspiro y me lleve hacia el cielo. Cortar mi corazón en finas láminas de soledad, viendo cómo tu imagen -toda tu esencia- se escapa de él. Extraer tu aroma de mis fosas nasales -que lo llevo muy adentro, que te llevo muy adentro-. Quisiera apartarte de mi vida, desterrarte de mi mente, despojarte de mi alma.

Me sobran y me faltan palabras para decirte que te quiero, que no puedo seguir ni un segundo más sin ti, que hoy -al verte- casi muero, que desespero con tu presencia porque he de vivir obligada a estar sin ella -sí, tu presencia, tu presencia-. Aún así, prefiero no tenerte a no haberte conocido, pues si no te conociera no sabría qué es amar.

sábado, 21 de febrero de 2009

¿Quieres ser mi capullo?

Soy una flor, ¿quieres ser mi capullo? ¿Te gustaría fundirte conmigo como si fuéramos uno? ¿O prefieres ignorarme, odiarme y escupirme cada vez que me veas?

Yo -mirándote de soslayo- me acerqué tanto a ti como las "normas" lo permitían. Mis palabras, mis preguntas, mis frases cortantes -tontas-, todas mis simplezas se lanzan al aire como si nada las detuviera. Es tu aroma el que me impacta, el que me retiene más tiempo porque el propio tiempo se torna nada y mi deseo se engrandece.

Solamente quería olerte, respirarte, mirarte hasta aborrecerte. Y nunca lo haría, amor, nunca lo haría -aborrecerte, digo-. Jamás me cansaría de ti porque eres tan , sí, tan tú mismo que... no sé cómo seguir. Es que no sé cómo decírtelo, que ya no sé... y me da coraje tener que callar porque yo soy mujer de no callar nunca -nunca de ahora-. Antes lo hacía pero ahora es distinto, todo es diferente porque te conocí y desde el momento en que fui consciente de mis sentimientos hacia ti, supe que mi voz debía estar con la tuya, que mi felicidad estaba junto a ti.

Me alejo, vuelvo a acercarme. Ruidos irrumpen mi silencio, mis manos tiemblan, mi voz se quiebra y mis ojos me abandonan para posarse en tu imagen.

HOY: La manzana reineta era tu símbolo.
SIEMPRE: Mi alma es la que te ama.

miércoles, 18 de febrero de 2009

Dulce agonía

No puedo sostener esta agonía, me está matando por dentro. Te ansío hasta tal punto que tu recuerdo se transforma en un mal sueño.

Voy padeciendo a cada paso, a cada apurada respiración. Voy queriéndote a cada instante en el que mi mente despierta te recuerda, a cada instante en el que mi mente dormida te sueña. Voy amándote abstractamente, pues no te tengo a mi lado: estás lejos de mi vida porque yo permanezco distante de tu pensamiento. Yo te recuerdo, tú a mí no. Nunca te olvido, tú a mí... quizá.

Eres mi delirio y, posiblemente, mi perdición aunque no me importa. Te quiero de una manera tan extraña, te amo de un modo tan inexplicable que esta sensación que llevo aquí dentro me vale para seguir adelante. Y sí, sufro pero este sufrimiento se desvanecerá justo en el momento en el que mis ojos se hayan encontrado con tu profunda mirada.
Eres mi dulce agonía.