Hoy...

No estoy de humor. Hubiera sido mejor si no hubiese despertado pero, en fin, aquí estoy.

Llego al instituto y la gente empieza a agobiarme preguntándome qué es lo que me pasa. Me han sacado de dos clases para que le cuente, a los profesores de éstas mismas, lo que me ocurre. Y yo no quiero. ¿Por qué? Porque no y punto. Ellos insisten y dicen que me quieren ayudar y bla, bla, bla... Nadie puede ayudarme, nadie logará entenderme. Es por eso que no se lo voy a contar a un profesor...

Es cierto que yo tengo mucha confianza con los profesores y me llevo muy bien con ellos. Pero no quiero... Ahora me apetece estar en el messenger y escribir algo... Después estudiaré (bueno, repasaré) para el examen de mañana, que debí haber hecho hoy y no he querido hacer ya que no me sentía con fuerzas.